En los primeros años noventa se comenzó a hablar del problema de la destrucción de la capa de ozono, se tomó conciencia del problema y adoptaron algunas medidas paliativas.
En 1992 realicé la serie OZONO de grabados sobre planchas de hierro.
Dos décadas después el problema persiste y la capa de ozono sigue degradándose a pasos agigantados.